sábado, 15 de marzo de 2008

Ese aplauso de los niños

Por qué habrán aplaudido los niños después de meditar?
Habrán sentido algo de sosiego en medio de sus juegos, que estaban descontrolados?
Tantas veces me pasa que tengo el impulso de reír, cuando me levanto de mi lugar de meditación...
De aplaudir también?
Y ellos lo hicieron, muy espontáneamente.
Me he quedado pensando en eso.

1 comentario:

Blanca dijo...

Es verdad. Jesús lo dijo. Que debemos ser como niños. Sin el prejuicio que nos estorba.
Ellos están más abiertos al asombro y a la sorpresa, y son más auténticos.
Ser como niña y aplaudir en mi interior agradecido y maravillado.
Gracias, Adolfo, por tus palabras, por leer mi blog y compartir.
Un abrazo